El antiguo barrio judío de Girona

Tuvo Girona una comunidad judía sólidamente instalada en un barrio que llamaron el Call. 1492 marcó el inicio de una diáspora que la llevaría por tierra y mar hasta aquellos lugares donde lograron reinstalarse en paz. Como otros correligionarios de la península ibérica, los judíos de Girona que no aceptaron el imperativo de convertirse a la fe católica, abandonaron el Call.

Pero el Call, con su amontonamiento de casas en el laberinto de calles empedradas no desapareció y se nos presenta hoy como uno de los barrios medievales mejor conservados de toda Europa y el más extendido de España. El ”museu d’historia dels jueus” en la carrer de la Força nos muestra el pasado de la comunidad, sus gentes, sus notables, su manera de vivir y de consagrarse a su espiritualidad. La antigua Sinagoga hace parte hoy día del recinto universitario. A la entrada del museo, la librería que lleva el señor Zelaya es una joya en información para quienes se interesan a la historia del pueblo judeo-español. Y entre tanto libro y manuscritos, encontramos uno muy pertinente, “Los Sefardíes. Historia, lengua y cultura” cuya autora, Paloma Díaz-Más, nos ofrece una visión precisa y documentada de la cultura sefardí.

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