Un órgano construido por los hermanos Eustache, remplazó en 1666 al primer instrumento. Aunque no existen documentos que lo atestigüen, todo hace pensar, que el segundo órgano fue destruido durante la revolución.
El tercer instrumento fue colocado hacia 1800, cuando la iglesia rezaba como bien privado. El origen del actual órgano es confuso aunque existen ciertas pistas. Siendo llamado Henri Jarrier, gran conocedor del órgano de Saint-Maximin, y en presencia de Alain Girard y de Hubert Caumette, descubrió una composición absolutamente clásica. La búsqueda en viejos archivos les permitió constatar que el órgano no corresponde a aquel construido por los Eustache, y al comparar el presupuesto de otro instrumento desaparecido, todo cabe indicar que el órgano actual de la collégiale es aquel que poseía el convento de los Cordeleros de Aviñón, construido en 1690 por los hermanos Barthélemy y Honoré Jullien, fabricantes de órganos en la ciudad de Marsella. Sin embargo, el hecho de que Antoine Jullien, padre de Barthélemy y de Honoré, haya reconstruido en 1649, el órgano de San Francisco de Cuoni en Italia, ayudado por el fabricante alemán Jean Baltasar Milder, y que más tarde construyó un instrumento en las cercanías de Cuneo, hace pensar también a la teoría de un órgano de factura italiana o de influencia nórdica. En todo caso, la collégiale posee un bello y magnífico instrumento, restaurado completamente en 1989. Y si tienen la ocasión de estar en la región, durante el Festival de Teatro de Aviñón, en el marco del festival In, cada año se ofrece un concierto de órganos. Momento ideal para descubrir el órgano de la collégiale de Roquemaure.
Aucun commentaire:
Enregistrer un commentaire