Suspendido sobre una cresta como tantos otros pueblos, Forcalquier protege como un tesoro los olmos de la plaza Bourguet, en cuyo centro se erige un obelisco que conmemora las nupcias de dos de las cuatro reinas nacidas en el burgo (Marguerite, Eléonore, Sanche y Béatrice).
La iglesia ND es de una sorprendente austeridad, la cual hace resaltar la elegancia de su pórtico gótico coronado por un rosetón.
La iglesia ND es de una sorprendente austeridad, la cual hace resaltar la elegancia de su pórtico gótico coronado por un rosetón.
En el viejo burgo, las callejuelas se empilan por encima de la iglesia y dan fe de un pasado floreciente.
A pesar de cierta decrepitud, las fachadas y puertas de los hoteles particulares dejan ver su solidez y antiguo esplendor. Subiendo y subiendo una estrecha callejuela se llega a la ciudadela donde se erige ND de Provenza y desde donde se aprecia toda el paisaje de colinas, crestas y valles que envuelven a Forcalquier, les preciso aún más: la montaña de Lure, el macizo de los Tres Obispos y las montañas de Luberón.